LA PRESIÓN DE SER PERFECTO AFECTA LA
SALUD MENTAL DE UN ADOLESCENTE
Los adolescentes que viven en lugares como el Condado de Orange pueden sentir la presión por ser perfectos en muchos aspectos de sus vidas. Existe una presión académica para obtener las mejores calificaciones, una presión social para tener cierta apariencia y una presión por el rendimiento para ser el mejor atleta. A veces, nuestros hijos se imponen esta presión extrema a sí mismos. Otras veces, la presión proviene de múltiples direcciones, como la escuela, el hogar, los amigos y las redes sociales.
Como padres, es posible que queramos minimizar o restar importancia a los intensos sentimientos que nuestro adolescente tiene acerca de ser perfecto. Sin embargo, para ellos, la presión es muy real y debe tomarse muy en serio. La salud mental y emocional de un adolescente es tan importante como su salud física.
ENTENDIENDO EL
ESTRÉS Y LA ANSIEDAD EN LOS ADOLESCENTES
Sentirse estresado o ansioso es parte del rango normal de emociones humanas, para algunos adolescentes estos sentimientos son tan intensos que les impiden hacer cosas cotidianas. Los trastornos de ansiedad son el trastorno de salud mental más común en los Estados Unidos. De hecho, el 8% de los niños y adolescentes experimentan un trastorno de ansiedad. Si crees que tu hijo podría tener un trastorno de ansiedad, asegúrate de buscar ayuda de un profesional de la salud mental.
CÓMO LOS PADRES PUEDEN AYUDAR
Aprender a manejar la ansiedad es una habilidad importante para la vida y tú puedes ayudar a tus hijos a aprenderla.
También puede ayudar a tu hijo alentándolo a usar un diálogo interno positivo, por ejemplo, “Puedo manejar esto. He estado en situaciones como esta antes”.
La ansiedad de tu hijo es real, incluso si es poco probable que suceda lo que le causa ansiedad. Esto significa que es importante reconocer la ansiedad de su hijo y decirle que está seguro de que puede manejarla.
Esto implica animar a tu hijo a establecer metas pequeñas para las cosas que le causan ansiedad. Por ejemplo, tu hijo puede estar ansioso por actuar frente a otros. Como primer paso, podría sugerirle a tu hijo que practique sus líneas frente a la familia.
El simple hecho de hablar sobre las cosas que los ponen ansiosos puede reducir la cantidad de ansiedad que siente tu hijo. Hablar y escuchar también lo ayuda a comprender lo que le sucede.
Consigue ayuda
La mayoría de la ansiedad normalmente desaparece rápidamente, en un día o unas pocas horas, y no siempre es algo malo. A veces, sentir ansiedad puede ayudar a mantener a los niños seguros al hacer que reflexionen sobre la situación en la que se encuentran, motivarlos a dar lo mejor de sí mismos y prepararlos para emprender desafíos difíciles, como hablar en público, realizar exámenes o participar en eventos deportivos.